Las Bières de Garde se suelen comercializar en botellas de 75 Cl. con tapón de champagne. Su nombre (“cerveza de guarda”) define perfectamente su origen: eran cervezas que se producían entre febrero y marzo para consumirse en verano, época en la que debido al calor no podía hacerse cerveza. La Bière de Garde nació en las granjas del norte de Francia. Originalmente eran cervezas de alta fermentación y sin filtrar, pero algunas cervecerías han preferido las levaduras de baja fermentación y dejar el producto libre de sedimentos.